Frutas y verduras que contribuyen a la buena salud

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, es importante consumir cinco porciones diarias de frutas y verduras como mínimo para tener una alimentación saludable y balanceada. Chile ha sido bendecido por una enorme variedad ecológica, lo que permite elegir las frutas y verduras de la estación, una medida que no solo permite ahorrar dinero a la hora de comprar los alimentos, sino que contribuye a proteger el medio ambiente y a reducir nuestro impacto climático.  

Aunque a quienes no están acostumbrados a consumir suficientes frutas y verduras como parte de su dieta les pueda parecer difícil, en realidad existen muchas alternativas fáciles para incorporarlas a nuestra alimentación diaria: pueden añadirse al cereal o a la avena de la mañana, licuarse para hacer un batido o smoothie, consumirse como snack tanto frescas como secas o liofilizadas, añadirse a una hamburguesa como parte de la preparación, o incluso congelarse en moldes para hacer helados. Es importante que intentemos incluir suficientes frutas y verduras al momento de hacer la compra semanal, ya sea que vayamos al supermercado o a las ferias populares, pero si nos encontramos sin frutas ni verduras en casa en un momento inadecuado también es útil recordar que siempre tenemos la opción de comprarlas con entrega a domicilio de uno de los supermercados que tienen alianzas con PedidosYa.

Al momento de elegir las frutas y vegetales que vamos a incorporar a nuestra dieta, debemos tener en cuenta factores como la temporada, que ya mencionamos, dado que las frutas poseen más nutrientes cuando están frescas y son locales, pero también nuestras preferencias personales, puesto que no sirve de nada obligarnos a consumir alimentos que no nos gusten, ya que se vuelve mucho más difícil convertirlo en un hábito y no tiene ningún sentido, al existir tantas opciones posibles que pueden adaptarse a nuestras preferencias. Por último, es una buena idea conocer qué vitaminas y nutrientes tiene cada fruta y verdura, y qué beneficios pueden aportar a nuestro cuerpo.

 

  • Arándanos: Los arándanos, en cuya producción Chile es un país privilegiado, suelen ser clasificados como un superalimento. Son altos en antioxidantes, ayudan a reducir las enfermedades inflamatorias, a combatir la diabetes y favorecer el colesterol bueno, así como a prevenir las enfermedades neurodegenerativas y el envejecimiento.
  • Pomelo: Además de ser una de las frutas predilectas a la hora de perder peso, dado su bajo contenido calórico, el pomelo es alto en vitaminas C y A, en ácido fólico, en potasio y en magnesio. Entre sus usos medicinales se encuentra la prevención de enfermedades cardíacas e hipertensión, arteriosclerosis, cáncer e intoxicaciones hepáticas.

 

  • Betarraga: La betarraga o remolacha es una excelente fuente de ácido fólico, vitamina C y potasio. Apenas cien gramos de betarraga son suficientes para cubrir la totalidad del requerimiento de ácido fólico diario de una persona adulta. Además, la betanina, el componente que da a la betarraga su color, es considerado un poderoso agente anticancerígeno.

 

  • Brócoli: Los beneficios del brócoli son tantos y tan variados que enumerarlos se vuelve difícil. Como los más importantes, podemos decir que ayuda a limpiar el colesterol “malo” y a prevenir la hipertensión, además de ser un agente preventivo de diversos tipos de cáncer, incluyendo el de útero, próstata, mama, intestinos, colon e hígado. Además, el aporte de calcio, magnesio, zinc y fósforo del brócoli lo convierte en un enorme aliado para proteger los huesos, y su contenido de vitamina A y luteína ayuda a cuidar la salud de los ojos de enfermedades como las cataratas. El contenido de vitamina C, E y ácidos grasos omega-3 ayuda a mantener la piel joven, sana y flexible, ya que contribuye a la formación de colágeno, defiende la piel del daño causado por los rayos ultravioleta.

Kale: Este superalimento, muy de moda en los últimos tiempos, se ha hecho popular por su bajísimo contenido calórico, su alto aporte de hierro, ácido fólico, ácidos grados omega-3, calcio y vitaminas C y A, y su alto contenido de fibra. El Kale tiene un efecto diurético, lo que ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares y a disminuir la hipertensión, y favorece el tránsito intestinal, lo que ayuda a corregir el estreñimiento y a controlar el azúcar en la sangre.

Articulo escrito por Luis García