WIXAL KA MAPU

WIXAL

La muestra WIXAL KA MAPU exhibe el resultado de procesos comunitarios de resistencia y recuperación de territorios textiles mapuche, que revitalizan el paisaje y los espacios a través de los llamados chañuntucos, confeccionados por las chilkatufe (estudiantes de la Escuela Taller Ad Llallin): alfombras personales mapuche de gran textura y color elaborados a partir de la innovación en técnicas ancestrales de tejido. La exposición incluye retratos fotográficos de las tejedoras, futuras monitoras comunitarias. La exposición permanecerá abierta al público, con entrada liberada, del 14 de noviembre al 28 de diciembre, de martes a domingo, de 11:00 a 14:00 y 15:00 a 20:00 horas. Inauguración: jueves 13 de noviembre, 19:30 horas.

Texto curatorial

SOBRE EL ESPÍRITU DE LA TÉCNICA Y EL PROCESO DE APRENDIZAJE

Los hilos descienden directamente del mundo del caos. Adoptando forma de vellón, se transforman en el torbellino espiral del movimiento concéntrico registrado.

El tiempo transcurre en los procesos del tejido prehispánico y actual, desde que se une un cabo a otro, girando en el sentido inverso al primer espiral y articulando así su encaje diagonal en “Z” o “S”. Este sostiene  la fortaleza de su estructura y es el soporte del textil e historia al que da vida.

 La impregnación de los jugos tintóreos botánicos, minerales, animales, sintéticos e industriales, va tiñendo una versión coloreada de cada territorio mapuche en sus propios tiempos.

 Los hilos que se traman en un textil, guardan secretos, sueños e historias ancestrales que deben ser protegidos y por ello, es preciso escucharles, pues es la düwekafe (tejedora) quien mantiene viva esas historias antiguas en su wixal (telar).

Cada tramada textil es parte de la memoria histórica de todo su pueblo, porque en esa conjunción mecánica, geométrica, matemática, de sístole-diástole, de inspiración y expiración es donde se abre y guarda un paño ancestral que vive entre las paredes posteriores y anteriores de los hilos verticales y tensos en esa urdimbre.

Aprender a tejer es un proceso constante y vivo donde se escucha el mensaje de esa llallin kushe (araña vieja) que permanece en cada wixal (telar) guardando el kimvn ka rakizuam (conocimiento y pensamiento) del pueblo mapuche.

La o el chilkatufe (estudiante) aprende observando con atención y detención, introspectiva/o ajusta la mirada hacia los acontecimientos antecesores, hacia lo antiguo, hacia los momentos de cambio, cuando surgieron las técnicas ancestrales entre las primeras artistas.